Es una fiesta tradicional que se celebra en muchos países de América y Europa, para agasajar a la futura mamá y dar la bienvenida al bebé.
En Argentina recién está empezando a conocerse, pero sin duda hará furor.
El final del embarazo es una etapa en la que la mamá empieza a despedirse de “su panza” y sus sensaciones, para empezar a dar lugar al bebé.
El baby shower tiene antecedentes históricos antiquísimos y hay indicios de que muchas civilizaciones primitivas llevaban a cabo reuniones similares, entre las mujeres emparentadas o afectivamente vinculadas. Se agrupaban en torno a la embarazada y entre risas y relatos ancestrales, le enseñaban a transitar esos últimos días, a respirar, a parir, a cuidar del niño, a amamantarlo, etc.
Más modernamente, sobre todo en EE.UU. donde está ampliamente difundido, el festejo tiene varias finalidades. Sentir el apoyo de otras mujeres amigas, futuras mamás o mamás recientes es fundamental para sentirse identificadas con lo que les pasa en ese momento.
En América Latina, desde el Caribe hacia el sur, se le ha dado un contexto más festivo: celebrar la vida. Si bien cada embarazo es distinto y cada embarazada lo vive a su propia manera, el Baby Shower surge como respuesta a la necesidad de la nueva mamá de ser valorada, entendida y preparada para el acontecimiento más importante de su vida.
Entre las participantes se intercambiarán datos útiles, consejos para el cuidado del bebé, se entretejen amistades, ya que se encuentran transitando experiencias similares.
El festejo también sirve para atenuar la ansiedad de los últimos tiempos y sitúa a la embarazada en el centro de la atención de todos.
Este evento, puede ser sorpresa, cuando lo organiza una amiga íntima, hermana o cuñada, o también puede organizarlo la propia futura mamá.
Se reúne a todas las amigas y conocidas alrededor de una mesa de té, y mientras charlan y comen cosas ricas se desarrollan juegos, algunos muy tradicionales e infaltables, se abre el centro de mesa-piñata, hay sorpresas y premios para todos.
Finalmente, cuando se abren los regalos, la mamá se encuentra con que tiene todo lo necesario para la llegada del bebito, desde el bolso para ir al sanatorio, pasando por el ajuar, ropa adecuada para ella, elementos para el relax, juguetes y accesorios para el pequeño y mucho más.
Por todo esto es que el Baby Shower va teniendo tanta aceptación. Es dulce, divertido, práctico e inolvidable.
Es de una nota extraída de:
http://www.bebesenlaweb.com.ar/elembarazoyvos/embarazo/babyshower.html
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